Segunda Celebración del Día de Muertos en Wisconsin

Reportaje por Itzel González para la publicación “Casa de México” del Instituto de los Mexicanos en el Exterior, México. Octubre 2022

Es bien sabido que una de las tradiciones más emblemáticas en la cultura de México, y por tanto, una de las festividades que perdura en el anhelo de las comunidades migrantes fuera del país es el Día de Muertos.

Esta fiesta nacional que está tan presente en gran parte del territorio, y que tiene a su vez,  grandes variedades regionales, ha sido el motivo para que grupos de artistas y migrantes mexicanos en el extranjero busquen recolectarse con sus orígenes, exploren nuevas etapas en sus procesos creativos y se sientan cobijados con la seguridad de lo conocido durante la intemperie que para muchos significa vivir en el extranjero.

Precisamente, en esta búsqueda, durante el pasado mes de Octubre se llevó a cabo la Segunda Celebración del Día de Muertos en el Área Driftless, Wisconsin, un monumental esfuerzo colectivo presentado gracias a la participación de distintas organizaciones y personas voluntarias de origen mexicano y estadounidense.

Entre los participantes se encuentran McIntosh Memorial Library, Driftless Curiosity, Keewaydin Farms, Consulado de México en Milwaukee y Mexican Folk Art Collective. Este último, un grupo surgido a raíz de la nostalgia y añoranza por el reencuentro con el arte y cultura tradicional que tuvo Gabriela Marván, quien fuera seleccionada junto a 37 artistas más para las Jornadas Culturales de artistas mexicanos residiendo en EEUU que se llevó a cabo en la Ciudad de México el año pasado.

Gabriela, quien es originaria de Cuernavaca, tiene formación en diseño gráfico por la Universidad Autónoma Metropolitana y una especialización en diseño multimedia por la Escuela de Diseño del Instituto Nacional de Bellas Artes, siempre estuvo interesada en el arte populary en la cartonería, así que tras vivir un largo proceso al adquirir su residencia permanente, comenzó a crear cartonería y piñatas en EEUU, para reconectarse con sus raíces e indagar en su veta artística “más alejada de la computadora y màs cercana a lo manual”.

Gabriela ha logradoconjugar su formación como diseñadora y su pasión por el arte de la cartonería con la gestión cultural. Ya en México, participó en la organización de Encuentros de Diseño Gráfico, por la Universidad Riviera, en el cual participaron distintos profesores y académicos de la UAM, UNAM, EDINBA, entre otras universidades. Esta experiencia fue uno de los primeros impulsos que tuvo en generar espacios en forma colaborativa, por lo cual, durante su estancia en Estados Unidos, buscó no solo la conformación de su colectivo de artistas, sino que también impartió talleres y pláticas educativas en los que buscó fomentar y hablar acerca de los aspectos culturales e históricosde la cartonería y el arte popular mexicano.

Para ella, las artes y las artesanías populares tienden a menospreciarse por el gran desconocimiento histórico y cultural de las tradiciones mexicanas; el representar demonios con los Judas, o mostrar cráneos o esqueletos con las Catrinas, se llega a considerar como blasfemia en distintos sectores de la sociedad que en ocasiones, no consideran que las culturas ajenas valen la pena entenderse. 

Para Gabriela, otro gran problema que espera combatir con la creación de su colectivo es una mejor representación y valoración del arte popular mexicano, el cual constantemente se ve ultrajado ante el saqueo, las compras por mayoreo por acaparadores, la exotización y la despectiva necedad de equipararlo con producciones en masa. Al artesano se le suele “regatear” el trabajo, se le borra el nombre y en las más ocasiones, su trabajo se ve replicado por grandes consorcios que se valen de los vacíos legales y la desprotegida identidad de los productos culturales.

Gabriela no sólo ha conseguido crear y gestionar una de las redes más importantes de maestros artesanos dentro y fuera de México, sino que también ha comenzado un estudio y desarrollo museográfico en Viva Gallery. Durante la pandemia organizó una serie de talleres y pláticas para dar a conocer no sólo su trabajo, sino también el trabajo de maestros artesanos que forman parte de su colectivo, entre ellos están Pedro Netzahualcoyotl (galardonado con el XLVII Gran Premio de Arte Popular); Alfonso Morales, maestro cartonero; la familia de artesanos alfareros Peguero García, entre otros.

Julieta Zavala

Julieta Zavala | photo by Mickey Mestiza

Lo que comenzó en 2020 con sólo 10 artistas, ha culminado las semanas recientes con la adición de 10 artistas más, entre los cuales se encuentra la diseñadora de modas Julieta Zavala. Ambas se conocieron en las Jornadas Culturales Binacionales, organizadas en Noviembre 2021, en la Ciudad de México: Julieta, quien es originaria de esta misma ciudad, vivió hasta los 20 años en la colonia Roma del lo fue en aquél entonces Distrito Federal. Durante su infancia, su madre encontró una maleta llena de ropa de muñecas, que fomentaron la obsesión y curiosidad de la pequeña Julieta. Con el transcurso de los años, decidió que quería dedicarse de alguna manera a algo que le recordara la emoción y la alegría en el juego de vestir una y otra vez a sus muñecas, como lo hizo gracias a la maletita con ropa diminuta que nunca nadie reclamó. Fue así como inició la jornada de aprendizaje, búsqueda y perfeccionamiento de técnicas de confección de prendas.

En su adultez temprana, Julieta viajo a Estados Unidos con la idea de tener una estadía breve que le pudiera generar algo de dinero para quizá costearse sus estudios en la prestigiada universidad que ofrecía diseño de modas en su ciudad natal. Para su sorpresa, revalidó sus estudios, aprendió inglés, fue a la universidad en el Art Institute en la ciudad de Filadelfia, y formó una familia con quien fuera su compañero  de estudios en la escuela nocturna.

En años recientes, Julieta decidió colaborar con el fotógrafo Manuel Flores en Dream Art Studio, la diseñadora ( y su amiga) Ada Reyes, la maquillista Letty Pineda y la artista Mónica López para presentar su primera colección de Catrinas en el Museo Penn de la ciudad de Filadelfia. 

Keewaydin Farms | Segunda Celebración de Día de los Muertos en el Área Driftless

Gracias al encuentro que tuvieron el año pasado con otros artistas, Julieta y Gabriela consiguieron reunirse nuevamente en Wisconsin, para presentar, junto con otros artistas locales (entre quienes se encuentran Julián y Adam Correa, Yesica Coria, Ceci Tejeda, Andrea Muñiz, Alejandra Jiménez) para ejecutar la celebración del Día de Muertos, que duró una semana y consistió en diversos talleres artísticos, confección de trajes diseñados  con hojas de maíz, semillas, danzas aztecas, armado de arcos y ornamentos de cempasúchil, puesta de ofrenda y diseño de un mural comunitario. 

El hospedaje de los artistas se llevó a cabo en la granja Keewaydin Farms. La composición y presentación de todos los trabajos fue in situ, y, acorde a muchos de los migrantes y visitantes que acudieron a la celebración: “se sentía como respirar el aire de México en Día de Muertos”.

Para ambas artistas ha significado mucho el mantener vivas las tradiciones fuera de la patria, que gracias a eventos como éste sen mantienen tan vivas como las llamas de las veladoras que iluminan los panteones a principios de noviembre en el país.

voluntaria en Día de los Muertos, cosecha de Cempasuchil.
Photo by Mickey Mestiza